viernes, 9 de abril de 2010

Antonio Vega (II)

Anoche escribí el post anterior en el que recordaba a Antonio Vega a unas horas del concierto que se celebrará esta noche en el Palacio de los Deportes.

Esta mañana, ha pasado algo muy especial. Gonzalo, uno de los que me acompañará esta noche, nos ha sorprendido con un email que nos ha despertado todos esos recuerdos. Os lo reproduzco aquí.

Esta noche arreglaré mi "desordenada habitación", me despediré de mi "chica de ayer" y en "una décima de segundo" bajaré a la calle. Sin mirar "atrás" encenderé mi "luz de cruce", y me dirigiré al Palacio.
Una vez dentro, con algo de "ansiedad" y entre "lucha de gigantes", intentaré ver el escenario" y podré decir , "para bien y para mal" que estoy en el "sitio de mi recreo"; y volveré a "ser un chaval" buscando sus "tesoros" entre "horizontes", absuelto de mi condena "a trabajos forzados" por ser viernes noche.
La guitarra comenzará a tocar "lo que tu y yo sabemos" y sin estar "esperando nada" nuevo, mi boca, que ya "se dejaba llevar por ti" y por tu música hace años, volverá a recitar tus letras.

Gracias Antonio.


El email ha removido demasiadas cosas y no he podido evitar darle respuesta.

Muchos años atrás nos conocimos, en un “recreo” que algunos de vosotros denostáis pero otros añoramos. Cuando pienso en esos años, los recuerdos llegan acompañados siempre de una banda sonora. Suena Antonio, suena Loquillo, suena Bosé (al volver de Roquetas sonaba MClan). Y suenan en cintas de casete rebobinadas con un bic, durante noches de botellón delante de una iglesia pija, cervezas en el 100x100, noches que acababan con exaltaciones a la amistad con varias copas de más, seguidas de algún gesto resignado de este abstemio…

Todos esos son ‘Días que no volverán’… Pero hoy, ‘Entre tu y yo’ sigue (casi) todo igual. Han pasado los años, pero siempre queda el recuerdo de aquel tiempo, en el que juntos ‘Aprendimos a vivir’ y vivimos (probablemente) ‘Lo mejor de nuestra vida’.
Hoy, esté donde esté, vuestro recuerdo lleva ‘Mi hogar a cualquier sitio’. A pesar de estar rodeado de ‘Juego Sucio’, ‘Circo’ y ‘Ansiedad’, ‘Lo que tú y yo sabemos’ es que ‘Quien soy’ hoy es sin duda gracias a ti, porque sois ‘Tesoros’ que un día encontré.

Y sí, yo me he despertado poeta también hoy, porque hay ‘Palabras’ que hacía mucho que no decía. Pero el tributo de esta noche me ha hecho recordar todo aquello.

Gracias a todos.
Gracias Antonio.


Estos dos emails iban dirigidos a un grupo de gente a que conocimos en el cole y hoy nos siguen acompañando. Aunque son cosas demasiado íntimas, he querido compartirlo con todos vosotros, porque Antonio Vega es parte de nuestra vida y, seguramente, parte de la de muchos de vosotros.

Antonio Vega

Esta noche, en el Palacio de los Deportes, se celebra un homenaje a Antonio Vega. No os voy a engañar, el cartel de homenajeadores no me apasiona, pero sin duda lo importante es Antonio y sus canciones.
Antonio no cantaba bien, no era guapo, no tenía presencia, pero cuando se subía a un escenario, aunque fuera en sus últimos años, era capaz de ponernos los pelos de punta con los primeros acordes de su guitarra. Precisamente por lo que decía en esas letras, pero seguramente, por los recuerdos que evocaban.

Hoy la pista del Palacio de los Deportes seguramente estará llena de mucha gente conocida, pero a todos ellos les diré lo mismo: Esta noche voy a ser muy egoísta. Quiero estar, a solas, con 2 personas que me acompañan desde hace años, a los que no dedico el tiempo que seguramente debiera.

Gonzalo, Juan, recordad: esta noche, ‘Mis dos (mejores) amigos’ y yo, tenemos una ‘Cita con el Rock and Roll’.